La gran mayoría de las veces en que niños caen a las piscinas, éstos se encuentran bajo la supervisión de un adulto. El problema es que el tema de la seguridad se pasa por alto el adulto se encuentra realizando otras actividades como leer, tomar el sol o escuchar música.
Para evitar este tipo de percances te damos algunos consejos muy útiles para pasar días en la piscina divertidos y seguros.
Consejos de seguridad para disfrutar de tu piscina con niños
1.- Rodear la piscina con una reja de 1,35 metros de altura mínima, para evitar que los niños puedan escalarla. Esta debe ser de un material firme y sus barras no deben estar separadas por más de 8 cm. La puerta de la reja debe ser abatible y cierre automático. Toda persona que la abra debe verificar que permanezca cerrada.
2.- Quitar todas las cosas que pueda utilizar el menor para acceder a la piscina por encima de la vaya como cuerdas, toallas colgadas, taburetes o sillas que les ayuden a escalar.
3.- Comprar chalecos salvavidas para los niños más peques con una parte para afirmar la cabeza y doble amarra entre las piernas para evitar que se suba. No confiarse en las “alitas o manguitos”, ya que dan una sensación de seguridad ficticia.
4.- Las alarmas para piscinas son una manera eficaz para proteger la vida de los niños. Funciona de una manera muy sencilla, detectando la caída a la piscina de cualquier objeto o cuando la puerta de la cerca de la piscina ha sido abierta, disparando una potente alarma.
5.- Si nuestra piscina tiene escaleras, contar con una barandilla. De esta manera en caso de resbalón o pérdida de equilibrio tanto niños como mayores podrás agarrarse sin problema.
A pesar de todos los accesorios y técnicas de seguridad que pongamos en marcha, al fin y al cabo, la vigilancia de los niños debe ser constante y cercana. Siempre debe haber un un único adulto designado para ello y quea responsable de la seguridad.
Para evitar problemas, lo mejor es no dejar juguetes en las proximidades de una piscina no vigilada y prohíba correr y jugar en los alrededores de ella si no se está con la presencia de alguien.
Por último, la educación y concienciación también es una parte muy importante para mantener a salvo a los pequeños de la casa. Para estar seguros de que no ocurre nada malo, no debemos enseñar a los niños a realizar saltos peligrosos y a tener cuidado a la hora de tirarse a la piscina. Además, también debemos hacer que entiendan que no pueden bañarse mientras no haya un adulto vigilando. La educación al fin y al cabo, es la mejor forma de prevención.
Photo credit: Joe Shlabotnik on Visualhunt.com / CC BY-NC-SA
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